SD-WAN centraliza la supervisión, la visibilidad y el control de la nube para permitir la implementación de sucursales automatizadas en ubicaciones geográficamente dispersas. El personal de TI puede gestionar todo el tráfico de red y las aplicaciones, y corregir cualquier problema desde una central en lugar de tener que visitar sitios remotos.

Un cortafuegos integrado con estado y con reconocimiento contextual de las aplicaciones, los usuarios y los dispositivos ofrece control granular de las microaplicaciones y compatibilidad con aplicaciones con saltos de protocolo. Un cortafuegos seguro puede separar el tráfico de voz, de vídeo, de datos y de conformidad. Además, SD-WAN se integra a la perfección con los mejores proveedores de seguridad, por lo que las organizaciones de atención sanitaria pueden implementar fácilmente el perfil de seguridad de su elección.  

SD-WAN segmenta el tráfico de forma integral para aislar los distintos tipos y cumplir los requisitos de conformidad. Los responsables de TI controlan todo el aislamiento del tráfico (mediante el enrutamiento y reenvío virtual [VFR]) por segmentos personalizados (voz, datos, HIPAA, PCI, etc.), que pueden aplicarse en función del tipo de sitio mediante plantillas de perfiles definidas. De esta forma, se garantiza la separación del tráfico IdC y de la tecnología operativa (TO) del de las historias clínicas electrónicas, por ejemplo. De igual forma, el acceso corporativo se separa del acceso a Internet de usuarios invitados en todas las ubicaciones de la red. 

Las organizaciones de atención sanitaria pueden implementar rápidamente nuevos sitios sin ningún tipo de intervención. Los dispositivos SD-WAN Edge implementados en cada ubicación primaria y remota autentican, conectan y reciben automáticamente instrucciones de configuración con el portal de gestión centralizada una vez se conectan a Internet.